¿Por qué no hay que escribir?
I Las palabras son a las cosas como el calendario al tiempo; intentos de atrapar aquello que se escapa como el agua entre los dedos. Simulacros que montamos como puntos de referencia. Las lenguas son esqueletos que sostienen ideas. Tal vez, sólo tal vez, las ideas sean independientes, no la estructura que las sostiene. Piénsese en este poema de un autor que no recuerdo: Un milagro Conservo algunos episodios milagrosos En una noche oscura un mensaje de mi padre Me decía: la luz de la luna con mesura: “alivia a los intoxicados de filosofía” Y no había luna en la ventana Y como no había luna, me aferré a la palabra “luna” Me dormí filosofando sobre una imagen de la luna Y la noche ya no fue oscura Las palabras son polvo así como todo hueso también lo es: nace y muere en el silencio. Toda palabra será olvidada y transformada en un mero sonido ininteligible y sin referencia a algo. Y, sin embargo, la idea detrás que alguna vez quiso apre...